Cercanía y lejanías
Acaso desparramado en el lado más débil
de la distancia la ternura del trotamundos
¿podrá ladear su cansancio de arena?
No, no traten inútil detener
la tromba ambivalente de hallar
hermosura en cada puerta semi-abierta de llegadas.
Tal es así la dicha vibrando en cada rastro
levantando polvareda de sueños en los corazones
llenos de alondras y destellos de minerales.
Leven todas las anclas del puerto
tan breve es la posada en los dedos luciérnagas
para roturar sobre la arena virginal, copihués de sangre.
A tu lado Chañaral sentí cómo la longitud
golpea artera con una comba amarga
a la simpleza de no poderla acariciar, venerarla.
Aprendí sin alguna facilidad, al fin
cómo cuando al lado te solazan con amaneceres dulces,
en las lejanías te abruma hondo la voz tierna, ausente de lluvia.
Por eso, hoy como nunca está vacía esta mano
busca a locas sus lágrimas áridas
y ya nada queda en estas cercanías-
Orlando Ordóñez Santos.
Chañaral – Chile
Octubre 2010.
1 comentario:
un abrazo de paz José Luis
la mejor de las energías siempre para compartir este andar lírico
buena semana:)
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