oráculo

31.7.10

aJULIO ABELARDO LUZA GIRONZINI,el cuasar de la vida literaria en el siglo XXI. DESDE LA CUEVA DEL ZORRO LIMA PERÚ





:: Fernando Chuquipiunta Machaca (*)



Julio Abelardo Luza Gironzini (Huancané-1945) es, sin duda alguna, un alarife de las palabras que hace algunos años llamó la atención de la crítica oficial con "Tambores Pluviales", un maravilloso libro de corte vanguardista y audaz que reveló a una de las voces más complejas y vitales de la generación de. Esta vez, tras un extenso y escarpado proceso creativo, llega a las librerías más importantes de la ciudad de Puno "Eternidad y Canto", un poemario que denota una búsqueda mucho más madura y comprometida con la expresión ideo-estética.




"Cuando escribo poesía encuentro algunas vetas temáticas que me permiten desarrollar metafóricamente-digamos-exploraciones emocionales. Sin embargo, con el tiempo esas vetas tienden a confundirse. "Tambores Pluviales", en un inicio, eran por lo menos de improbables articulaciones, pero el poemario se fue decantando hacia las figuras que prevalecieron, de manera general. Eso no implicó que la estructura en base a la antología poética se perdiera, ni que se sintiera que existe un recorrido, hasta te podría decir que es una arquitectura verbal. “Las Manos Vacías” tuvo una génesis similar, donde el sujeto lírico se hizo con las fibras del alma", asegura el poeta Julio Abelardo Luza.




"Para la selección de los textos seguí dos criterios: el gráfico y el conceptual. El primero implica evaluar qué tan bien te ha ido en ese corpus dimensional que tiene todo poeta: hacer imagen con palabras. Contra lo que se pueda pensar, creo que la unidad de valor en la poesía es el poema, no la obra. El segundo criterio pasa por ver de qué manera los poemas se apoyan entre sí de tal manera que se configura un cordón umbilical, una caja de resonancia que les permite potenciarse unos con otros", reflexiona el autor.




Las descripciones son el elemento básico del libro, y Julio Abelardo Luza Gironzini apela en ellas a todo su talento poético conjugando imágenes, metáforas y símiles con elaborados juegos verbales y un verdadero virtuosismo en el manejo de la retórica. Estas extensas y deslumbrantes descripciones mantienen siempre la frescura y el espíritu lúdico propio de la juventud de los liróforos celestes. En síntesis, Julio Abelardo Luza Gironzini recoge estas influencias espirituales, aparentemente contradictorias, para crear a partir de ellas una obra personal, original y valiosa. De la misma manera, sus poemas engarzan las dimensiones líricas, llenas de caligramas dedicadas a la vida y a la esperanza, pero escritos, esencialmente, con una luz poética distinta y renovadora.




2) ENTREVISTA



En el libro "Eternidad y Canto" percibo una variedad de voces que van desde la nostalgia, el despecho, la tristeza, entre otras características.



Sí, pero no solamente existen estas voces, como bien has dicho, existe una variedad de voces y sensaciones a través de ellas. También existe calma. En esta segunda edición existe una isla que da calma y en ella se forjan nuevas fortalezas, nuevas soledades, nuevos reencuentros. La nostalgia es un sentimiento natural al que me voy acostumbrando poco a poco; ya no me causa pavor extrañar tanto. Las distancias se encogen cuando se piensa más despacio, y la poesía ayuda bastante.



Un elemento protagónico del libro es el lenguaje.


El lenguaje, sin duda, es el protagonista de la obra, de mi vida, del mundo. Sin el lenguaje nada existiría, ni siquiera las emociones podrían materializarse. En mi libro, y en mi poética, intento trabajarlo de una manera bastante personal. Juego con él, aunque pueda sonar redundante. A veces se puede pensar que el lenguaje te mira; el problema es cómo le sostienes la mirada. Ahí llega la poesía también.



José Gabriel Valdivia destaca la unidad de su libro "Tambores Pluviales". ¿Cómo así decides afrontar el poemario de esa manera?


El poemario fue creado con la intención de mantener una unidad, un hilo conductor que mantenga no sólo las temáticas, sino también las voces que se intercalan en los poemas fijos, sin perderse entre ellos. Me interesa que el libro sea un “todo” orgánico, capaz de mantenerse en pie por sí mismo. Siempre existe una intención de “orden” en los libros; aunque sea un orden subjetivo, personal, aleatorio, siempre existe.



3) POEMAS:



Bohemiada


Julio Abelardo Luza Gironzini

Han de tardarse en llegar los amigos



con su soledad de rostros humedecidos


de tanto invierno y queriendo morir


en los últimos rincones del alma.



Cuánto han de tardarse los amigos


en llegar y si no me encuentran


se irán con la tristeza de los ojos


o con sólo su soledad


y mis labios humedecidos.



Que no sea tarde cuando regresen


que encuentren intacto mi dolor


y que saquen la cuenta de estar atados


por tanto tiempo.



Que no sea tarde cuando me encuentren


saboteando mi soledad


con ese dolor que me duele hasta en el alma



Reminiscencia


Julio Abelardo Luza Gironzini



No se puede hacer la diferencia entre la luz


y el juramento escondido en el manantial


rojo de los atardeceres


desde este rincón de la luna que se extingue azul amarilla



los atardeceres se visten de luz brillante


cuando los caminos se unen


y los amantes recogen sus manos


en oración contrita



el manantial ha recogido sus aguas


desde la última forma de los besos


que le alumbran el alma


y que le escriben versos en roca viva

VII CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL 2010, CONGLOMERADO CULTURAL DESDE LA CUEVA DEL ZORRO LIMA PERÚ


Miniatura de elemento



29.7.10

Gary Alminagorta c. en la cueva del zorro Lima Perú





Unos pasos



Bajo el día dos pasos agazapados


se emergen en el firmamento.


Dos, tiernos, dulces, como la caricia


de unos jazmines.



Bajo la tarde, el aroma crepuscular


se enternece en el firmamento.


A borbotones el dulce rocío


cobija la dicha.



Bajo la noche,


jugando en el céfiro primaveral,


la luciernaga palidece


al ver el haz de una carcajada.



Yace la mañana portentosa


enamorando a la figura,


al cuadrado palpitante,


al color sonriente de dos ojos grises.



Gary Alminagorta C.

Reconocido crítico Literario Julio Ortega visitará la casa de la literatura desde ala cueva del zorro lima Perú




• Reconocido crítico literario Julio Ortega visitará la Casa de la Literatura Peruana.


Continuando con nuestras visitas ilustres, la Casa de la Literatura Peruana (Jr. Ancash 207, antigua Estación Desamparados), recibirá el jueves 29 de julio al crítico literario Julio Ortega. El reconocido hombre de letras recorrerá las instalaciones de la institución y a las 12:30 p.m. ofrecerá la conferencia Rumbo a los centenarios de Arguedas y Westphalen.


Julio Ortega (Perú, 1942) es un crítico, ensayista, profesor, poeta y narrador peruano cuya obra de pensamiento es una de las más importantes de América Latina, por sus lúcidas reflexiones acerca de la literatura y sus relaciones con la historia y la sociedad. Estudió literatura en la Pontificia Universidad Católica del Perú, posteriormente viajó a EE.UU. invitado como profesor visitante por las Universidades de Pittsburgh y Yale. Vivió en Barcelona donde trabajó como traductor y editor. Luego regresó a EE.UU. como profesor de la Universidad de Texas, donde en 1978 fue nombrado catedrático de literatura latinoamericana. También ejerció la docencia en las universidades de Brandeis y Brown (EE.UU.).
Es miembro de las academias de la lengua de Perú, Venezuela, Puerto Rico y Nicaragua. Ha obtenido los premios: Juan Rulfo de Cuento (Francia), Bizoc de novela breve (Mallorca), Casa de la América de ensayo (Madrid) y el COPE de cuento (Lima).


Su primer libro de crítica La contemplación y la fiesta (1968), está dedicado al “boom” de la novela latinoamericana. De su crítica ha dicho Octavio Paz:”Ortega practica el mejor rigor crítico: el rigor generoso.”